Estas tareas diarias se volvieron más rápidas, más seguras y más efectivas.
Tuppeware
Dejando a un lado el vidrio y el plástico, no todos los recipientes de comida son ideales para el microondas. Las esquinas de los contenedores rectangulares generalmente atraen más energía que otras áreas, dejando la comida en esos lugares recocidos. Un recipiente redondo permitirá que los alimentos se recalienten más uniformemente.
Licuadora
Hay una razón por la que tu licuadora se detiene cada pocos segundos: el orden de los ingredientes hace una gran diferencia. Comienza con tu base líquida o yogur, luego agrega los ingrediente de los más pequeños a los grandes, metiendo las piezas más duras, como el hielo, en la parte superior.
Los líquidos dejarán que las cuchillas corran suavemente sin que se enganchen los ingredientes duros.
Tostador
El tipo de pan que estás tostando afecta la temperatura en la que debes configurar tu tostadora. Mientras que los panes blancos y dulces se calientan rápidamente, los más pesados como el centeno toman más tiempo. Incluso las rebanadas del mismo pan pueden necesitar un ajuste diferente después de unos días.
Una vez que el pan comienza a secarse, es posible que necesite menos calor para las rebanadas menos frescas, que no tardan tanto en tostarse.
Parrilla
Dejar la puerta de tu horno cerrada cuando asas puede hacer que se acumule calor y vapor. La ventilación del vapor permite que tu comida desarrolle la corteza que estás buscando y dejar que salga el aire caliente asegura que el calor se concentre en la parte superior en lugar de hornear todo el plato de manera efectiva.
Calentar comida en el microondas
La energía de este dispositivo se concentra en la sal, por lo que una cubierta sazonada enviará demasiado calor a la tapa exterior de tu comida, dejándola seca. Agrega sal después de calentar o mezcla en tu plato de antemano para evitar la sequedad.
Procesador de alimentos
Las licuadoras tienen cuchillas desafiladas pero motores potentes, mientras que los procesadores de alimentos tienen cuchillas más afiladas y motores más débiles. Usa una licuadora para cualquier cosa que deba ser súper suave con una consistencia uniforme como los batidos, bebidas y sopas cremosas.
Pero cuando trabajes con alimentos duros como nueces y ajo, saca un procesador de alimentos, que es ideal para recetas un una textura más gruesa, como el pesto.
Lavavajillas
Un estudio de la Universidad de Birmingham encontró que el mejor lugar en tu lavaplatos depende del tipo de suciedad que tenga tu plato. La mitad de la máquina recibe el rocío más fuerte de agua, lo que lo hace mejor para las mancha a base de carbohidratos como las papas o los tomates.
Por otro lado, el detergente se encuentra en su mayor concentración en los bordes, donde fluye hacia abajo como una cascada, lo que lo convierte en el lugar más efectivo para la suciedad a base de proteínas como los huevos que necesitan más tiempo para remojar.
Cuchillos
Los cuchillos de cocina grandes son lo suficientemente aterradores sin tener que centrarse en cómo los sostienes. Muchas personas simplemente envuelven su mano alrededor del mango. Sin embargo, se supone que debes sostener el pulgar y el dedo índice a los lados de la hoja. Este agarre te ayudara a conseguir cortes más precisos.
Camisas abotonadas
Si nunca has usado ese pequeño lazo en la parte posterior de tu camisa de vestir, es posible que tengas arrugas innecesarias. El bucle se agregó en la década de 1960 para que los hombres pudieran colgarlos en los casilleros de los gimnasios sin tener arrugas en sus camisas mientras hacían ejercicio.
Tomado de rd.com 36 Everyday Items You’ve Been Using Wrong This Whole Time
