Científicos revelan que la cafeína de esta bebida disminuye las probabilidades de que aparezca esta afección cutánea, llamada rosácea.
Las personas que padecen rosácea por lo general se alejan del café por recomendación médica, pero un nuevo estudio científico arrojó que a mayor consumo de cafeína, menor el riesgo de que se presente esta patología cutánea.
La rosácea —que suele confundirse con acné, reacción alérgica u otros problemas de la piel — es una afección cutánea frecuente que provoca enrojecimiento y vasos sanguíneos visibles en la cara. También puede ocasionar bultos pequeños y rojos con pus.
Aunque este padecimiento puede afectar a cualquier persona, ataca con mayor frecuencia a las mujeres de mediana edad con piel blanca. La rosácea no tiene cura, pero puede controlarse con tratamientos.
Según el estudio llamado ‘Asociación de la ingesta de cafeína y el consumo de café descafeinado con riesgo de incidentes de rosácea en mujeres’, que fue publicado hace unos días, los investigadores del Departamento de Dermatología de la Escuela de Medicina Warren Alpert de la Universidad Brown, hallaron una asociación entre el riesgo de rosácea incidente y la ingesta de café (no té, refresco ni chocolate).
Tras realizar un estudio con 82 mil 737 personas, entre ellas 4945 con rosácea, se descubrió la asociación de la ingesta de cafeína con la reducción del riesgo, específicamente con el consumo de café.
Los científicos notaron que las personas que bebieron cuatro tazas de café al día, tuvieron menos probabilidades de desarrollar rosácea que las que tomaron solo una taza al mes. Se sabe que la cafeína disminuye la vasodilatación y tiene efectos inmunosupresores, por eso disminuye potencialmente el riesgo de que la rosácea aparezca.
Los investigadores precisaron que sus hallazgos no apoyan la limitación de la ingesta de cafeína como un medio para prevenir la rosácea, pero que ciertamente se necesitan más estudios, pues la relación entre el riego de rosácea y la ingesta de cafeína, incluido el café, es poco conocida.
