Es una mujer bella, estrafalaria, dueña de sí misma y con una vitalidad desbordante.
Tras una ausencia de 12 años, Cher ha vuelto. Acaba de lanzar un nuevo álbum titulado Closer To The Truth, aunque en realidad nunca se ha ido. La cantante, de 67 años, inició su carrera hace casi medio siglo con Sonny Bono, quien entonces era su esposo y con el cual formó el dueto Sonny & Cher. En los años 70 y los 80 —luego de divorciarse de Bono en 1975— se reinventó a sí misma, y no sólo como cantante. En 1988 ganó un Oscar por su papel en la película Hechizo de luna. Sin embargo, muchos de los titulares que le han dedicado los periódicos a lo largo de los años no se han referido a sus méritos como artista, sino a su extravagante sentido de la moda, a sus jóvenes amantes y a sus operaciones estéticas. Entrevistamos a Cher en su mansión en Malibú, California.
P: ¿Es fácil ser Cher todo el día?
R: Nunca he sido otra persona, así que no sé qué contestar.
P: ¿Te gustaría ser otra persona a veces, aunque fuera sólo un día?
R: Me parece que sí.
P: ¿Quién te gustaría ser?
R: Nadie. Simplemente poder salir, dar una vuelta, ir a cualquier sitio sin preocuparme de si alguien me va a reconocer o a sacarme una foto. Hablo de libertad. Podría subirme a mi moto e ir adonde quisiera.
P: Tu nuevo disco es un álbum de dance moderno. ¿Aún vas a bailar?
R: Es difícil hacerlo porque ahora todo el mundo tiene un iPhone. Así que en el momento en que vas a algún sitio, te sacan fotos horribles y las suben a Facebook o a Twitter inmediatamente. Por eso tengo que elegir el momento. No es tan fácil como antes ir a un club y bailar hasta acabar con el pelo empapado.
P: ¿Hay alguna diferencia entre la Cher que vemos todos, la diva que quiere ser siempre joven y se rodea de hombres jóvenes, y la Cher real?
R: La Cher que conocen todos es una versión exagerada de mi persona. Excepto cuando estoy de vacaciones, me hace tan feliz salir a la calle en pantalón deportivo como con un traje de lentejuelas. De hecho, ni siquiera me interesan mucho los trajes de lentejuelas. Por cierto, en mi vida privada soy bastante tímida.
P: ¿Qué has aprendido en seis décadas en el mundo del espectáculo?
R: A no preocuparme ni molestarme por cosas triviales, por cosas que voy a olvidar, que no tienen importancia. Mi madre me dio un gran consejo cuando era yo joven: “Si en cinco años una cosa no te va a importar, es que no tiene importancia”. Debería recordarlo con más frecuencia
P: A tus 67 años, ¿has llegado adonde siempre quisiste estar?
R: No, aún sigo en camino. Habré muerto cuando llegue al lugar donde siempre he querido estar.
P: Tu nuevo álbum parece tratar sobre el empoderamiento, al menos hasta cierto punto. También habla de cómo divertirse y disfrutar.
R: Nunca saco un disco nuevo para hablar de una sola cosa. No hice este álbum para dar poder a las mujeres. Pero escojo canciones que hablan de mis experiencias y de las cosas que más me atraen.
P: ¿Está Cher buscando todavía el amor de su vida?
R: No, ya he tenido muchos amores en mi vida, aunque tuve uno que fue fabuloso: Rob Camilletti.
P: Tina Turner acaba de casarse a los 73 años. ¿Harías tú lo mismo?
R: Me alegro mucho por ella. Tina y Erwin [Bach] han estado juntos toda la vida. Pero no sé. No me imagino queriéndome casar otra vez, aunque jamás se debe decir nunca.
