Jucilene Marinho, una joven brasileña de 23 años, se convirtió en la primera mujer en someterse a una cirugía reconstructiva de vagina usando piel de tilapia, un procedimiento creado por un innovador grupo de investigadores de la Universidad Federal de Ceara.
Según lo reportó el sitio en línea del New York Post la cirugía, que se realizó en abril del 2017, le habría permitido a Marinho sobreponerse a un desorden congénito que ocasionó que naciera sin paredes vaginales.
Ella nació con el síndrome Mayer-Rokitanski-Küster-Hauser, el cual es la causa de que haya nacido sin cuello uterino, útero, ni ovarios. Este padecimiento afecta a 1 de cada 5,000 mujeres.
Cuando tenía 15 años, la vida de Jucilene se derrumbó por completo. Como a la mayoría de las mujeres, los dolores de la menstruación se hicieron presentes, pero esta nunca llegó, por ello, fue a una revisión y descubrió que la apertura de su vagina estaba cubierta por tejido.
Los especialistas le aseguraron que lo único que le hacía falta a su órgano reproductor eran las paredes vaginales, lo que le impediría tener relaciones sexuales.
“Lloré mucho cuando me enteré … Pensé que mi mundo se había acabado. Siempre soñé con tener un bebé y tuve aceptar que no sería posible”, aseguró la joven universitaria.
A Jucilene le ingresaron un molde de acrílico con la forma de vagina cubierto con la piel de pescado en una abertura entre la vejiga y el ano. El molde fue retirado 10 días después de la intervención.
El cuerpo de la joven reaccionó positivamente, absorbió la piel de la tilapia y funcionó como células madres que permitieron formar un tejido similar al de una vagina real.
Luego de meses de recuperación, MArinho tuvo relaciones íntimas por primera vez. “Al inicio estaba asustada porque pensaba que me dolería o que me podría dañar. Pero fue un momento maravilloso porque todo salió perfecto. No hubo dolor, solo placer y satisfacción”, añadió.
Los especialistas brasileños que llevaron a cabo el procedimiento, comenzaron a usar la piel de tilapia en el 2015 para ayudar a pacientes con quemaduras.
A la piel de este particular pescado de agua dulce se le atribuye ser rico en colágeno, resistente a ciertas enfermedades y ser tan fuerte como la humana.
