El bullying cibernético es un peligro constante para los niños y los adolescentes de hoy, pero hay cosas que puedes hacer como padre para protegerlos.
Aprende el funcionamiento de las redes sociales
Si no estás familiarizado con Facebook, Twitter y otros sitios de intercambio, aprende a utilizarlos. Pide a tus hijos que te muestren su perfil.
Comunícate con tus hijos
Pregúntales qué hacen cuando están en línea y por qué; después establece reglas y explícalas.
Limita el tiempo de uso de la computadora
Permite a tus hijos, digamos, media hora de Internet después de clases para chatear con sus amigos o entrar a las redes sociales. Luego, deberán usar la computadora sólo para hacer tareas, sin enviar ni leer mensajes instantáneos.
Haz tu tarea
Revisa el historial de navegación de tus hijos para saber qué hacen en línea, y revisa esos sitios con regularidad. Usa las herramientas de seguridad y funciones de privacidad que ofrece el navegador o el proveedor del servicio de Internet para obtener una protección extra.
Asegúrate de que los sitios que ven tus hijos tienen restricciones de privacidad
Uno de cada cinco menores de edad recibe solicitudes sexuales en línea. Pederastas y explotadores ponen la mira en víctimas potenciales, y su tarea se facilita cuando los chicos revelan en su perfil de usuario su nombre real, edad, sexo y lugar de residencia.
Averigua con qué personas hablan tus hijos en línea
Revisa su lista de amigos: ¿en verdad conocen a cada uno de ellos, o algunos son “amigos de amigos”? Haz que eliminen de la lista a cualquier contacto que no conozcan en persona.
Diles que no intercambien información personal
Como su número telefónico, dirección, el nombre de su mejor amigo o amiga, ni fotos que muestren su rostro. Que tampoco inviten a desconocidos a sus fiestas, les revelen detalles sobre su vida personal, ni se reúnan con ellos en la calle, nunca.
