Al adoptar un perro o un gato adquieres una enorme responsabilidad con el ambiente de tu casa, del vecindario y de la ciudad en general.
Por un manejo inadecuado de los desechos de las mascotas, en las calles de la Ciudad de México cada año se depositan cientos de toneladas de desechos que provocan graves problemas de salud tanto a los animales como a las personas.
Por eso, tener una mascota te compromete a ser responsable de ella, y también del cuidado del medio ambiente. Estos consejos pueden serte útiles:
- Prefiere productos y medicamentos que vengan en envases económicos (bolsas o sobres) a los que se venden en botella o lata. Son menos voluminosos y más fáciles de reciclar.
- Lleva siempre contigo una bolsa para recoger los desechos de tu mascota cuando den paseos en la calle.
- Evita darle carne cruda o poco cocida; esto dificulta la digestión.
- Nunca la dejes salir sola a la calle, porque además de que no te darás cuenta de dónde depositó sus desechos, podría ser un riesgo para la seguridad de otras personas.
- Bríndale atención veterinaria de manera periódica.
- Mantén limpios los recipientes donde come y bebe. Revisa que no tenga pulgas o garrapatas.
- Al bañarla, procura hacerlo con uno o dos baldes de agua. Mójala, aplícale el producto de limpieza y enjuágala bien con el agua.
- En época de frío, báñala lo menos posible. Córtale el pelo para que esté más fresca y cómoda, y menos propensa a ensuciarse y atrapar insectos.
